miércoles, 30 de abril de 2025

Turó de Morou (1.317 msnm)

En esta excursión no solo quiero subir otra cima, también quiero recorrer algunas de las curiosidades que guarda la Vall de Santa Fe. Salgo del aparcamiento de Can Casades y siguiendo el Itinerari adaptat de la Font del Frare enseguida llego a la fuente, a partir de aquí voy campo a través por el hayedo para ir a buscar el curioso Faig Enforcat, desde donde sigo por la Casa Partida y la Torre d'en Lleonard para ir a buscar la Font Nova. Como no la encuentro continúo hasta la Font del Quatre, es un poco difícil de encontrarla entre el hayedo pero esta si que es más visible. Poco más arriba enlazo con el itinerario señalizado hasta un desvío que indica "Pou de Neu", continuando por ese sendero se llega a la Pedra Ajaguda y el Cigalot, dos curiosas formaciones rocosas que bien valen la pena el desvío. De vuelta al itinerario señalizado este me lleva hasta los pies del Esquei de Morou (1.291 msnm) donde hay muy buenas vistas, para llegar a la cima hay que trepar por las rocas de la misma. El itinerario señalizado continúa sin pérdida hasta el Turó de Morou, la cima resulta un poco decepcionante, apenas unas rocas entre el hayedo sin ninguna vista.
Bajando por el hayedo llego hasta el Empedrat de Morou, mirador natural sobre el Turó de l'Home y Les Agudes. Poco más abajo enlazo con la pista que me lleva hasta el Pantà de Santa Fe, pasando por la Font del Baladrell. El embalse luce magnífico esta primavera lleno a rebosar, voy rodeándolo para remontar la Riera de Santa Fe y llegar hasta l'Estanyol, antigua esclusa donde nacía la toma de agua de la pequeña central hidroeléctrica de La Fabriqueta, de aquí a la Ermita de Santa Fe del Montseny y Can Casades.
Font del Frare.
Riera de Passavets.
El Faig Enforcat.
La Casa Partida.
Torre d'en Lleonard.
Campo a través.
Font dels Cuatre.
Itinerario señalizado.
Boix Grevol.
Pou de Neu camino al Cigalot y la Pedra Ajaguda.
La Pedra Ajaguda.
El Cigalot.
Esquei de Morou.
Cima del Esquei de Morou.
Vistas hacia Les Agudes.
El Pirineo aún está bien nevado.
Zoom sobre el Puigmal.
Arbúcies.
Cima del Turó de Morou.
Cúpula verde bajando hacia el Empedrat de Morou.
El Empedrat de Morou.
Panorámica hacia el Turó de l'Home y Les Agudes.
Cambio de vegetación con la orientación.
Font del Baladrell.
Can Figueroles.
Pantà de Santa Fe a rebosar de agua.
Faig del Pantà Gros.
Bonito detalle de sus raíces.
Riera dels Verns.
La Fabriqueta.
Riera de Santa Fe.
Salto de agua de l'Estanyol.
Ermita de Santa Fe del Montseny.
Can Casades.
Distancia: 10,1 Km.
Tiempo: 4 hrs. 5 min.
Desnivel acum.: +394 mts. -394 mts.

jueves, 24 de abril de 2025

Pica Cerví de Durro (2.656 msnm) desde Pla de Vaques

La Semana Santa marca el final de la temporada de esquí... ¡pero aún queda mucha nieve para esquiar! es el momento perfecto para disfrutar sin el bullicio de la gente abarrotando las pistas. Salgo con los esquís puestos desde el mismo aparcamiento de Boí-Taüll en Pla de Vaques y voy siguiendo las pistas más suaves hasta llegar al Pla de la Carlina al pie de el Pas de Llevata y el Port d'Erta. Continúo subiendo hasta el Port d'Erta donde me recibe un fuerte viento del Este, hasta aquí las pendientes han sido relativamente suaves pero ahora enfilo la pala sur de la Pica Cerví de Durro y toca ir haciendo zigzags para superarla. Cada vez que me acerco a la cresta el viento en contra me dificulta el ascenso pero llego a la cima sin necesidad de poner las cuchillas.
En la cima no me estoy ni un minuto a causa del fuerte viento, nada de foto de cima, incluso la operación de quitar las pieles de foca tengo que hacerla con mucho cuidado para que no se las lleve el viento. Empiezo el descenso con precaución ya que los primeros giros son sobre nieve dura y ventada, voy buscando la parte de la pala más protegida del viento y que también tiene menos trazas de descenso. Ya a media pala la nieve está en su punto, lo que me permite disfrutar encadenando un giro tras otro, ni tan siquiera me paro en el Port d'Erta, bajo de un tirón hasta el Pla de les Bassetes donde hago un breve descanso. Las pistas de la parte más baja de la estación se mantienen muy bien a pesar de la nieve un poco más blanda y me permiten seguir disfrutando del resto del descenso hasta el aparcamiento.
A primera hora en Pla de Vaques.
Pas de Llevata y Pica Cerví desde El Pla de la Carlina.
Port d'Erta, vistas hacia la Pica de Cerví.
La Pica Cerví de Durro desde el Port d'Erta.
Cima de la Pica Cerví de Durro.
El Port d'Erta desde la mitad de la bajada.
Mis trazas de bajada en la pala de la Pica Cerví de Durro.
Port d'Erta desde el Pla de les Bassetes
Pica Cerví de Durro desde Pla de Vaques.
Punta Alta de Comalesbienes.
Magnífico aspecto de Boí-Taüll al finalizar la temporada de esquí.
Panorámica hacia el norte desde el aparcamiento de la estación.
El Aneto medio escondido por las nubes.
Primavera en Sant Climent de Taüll.
Distancia: 7,0 Km.
Tiempo: 2 hrs. 47 min.
Desnivel acum.: +612 mts. -612 mts.

domingo, 13 de abril de 2025

Prerrománico asturiano (I)

Tras visitar la Colegiata de Santa Juliana en Santillana del Mar empezamos a recorrer el prerrománico asturiano. Se trata de un estilo arquitectónico que se desarrolló entre los siglos VIII al X en lo que fue el primer reino cristiano de la península tras la penetración musulmana el año 711. Del estilo visigodo hereda el uso del arco de herradura o el arco de medio punto peraltado y la planta basilical de tres naves con ábsides cuadrados. Una de las características más llamativas del prerrománico asturiano es la cámara del tesoro, una pequeña habitación situada sobre la capilla central con una ventana geminada o tripartita por la que se accedía desde el exterior con una escalera de madera, se supone que se usaba para resguardar las reliquias. También se pueden ver, o así nos lo parece, influencias mozárabes como el uso del alfiz en la decoración de las ventanas geminadas o los motivos vegetales de los capiteles.

Cangas de Onís.

Nuestra primera parada es en Cangas de Onís, capital del primitivo Reino de Asturias, donde se encuentra la pequeña Capilla de la Santa Cruz. Fue construida por el rey Favila, hijo de Pelayo, alrededor de un dolmen usado como altar y fue consagrada a la Santa Cruz el 27 de octubre del 737, por tanto sería la más antigua de todas las que visitaremos estos días. Fue reedificada el 1663, totalmente destruida durante la guerra civil y nuevamente reconstruida el año 1950, por lo que de la capilla original tan solo quedan los grandes bloques de la mitad inferior y poco más. Según la tradición, este capilla fue depositaria de la cruz de roble que Pelayo portó durante la batalla de Covadonga que el año 908 sería recubierta con láminas de oro y piedras preciosas por el rey Alfonso III el Magno, pasando a llamarse Cruz de la Victoria, y que actualmente se encuentra en la Cámara Santa de la Catedral de Oviedo.
El otro monumento y quizás el más emblemático de Cangas de Onís es "El Puentón". Aunque es conocido y publicitado como puente romano en realidad se trata de un puente medieval (S.XIII) que muy posiblemente fuera una reconstrucción de otro anterior de época romana. En el arco central hay suspendida una réplica a gran tamaño de la Cruz de la Victoria, símbolo de Asturias.
Capilla de la Santa Cruz (S.VIII).
Cabecera de la Capilla de la Santa Cruz.
"El Puentón" de Cangas de Onís.
Reproducción de la Cruz de la Victoria en el puente.

San Salvador de Priesca.

Situada en el núcleo rural de Priesca, muy próximo a la villa de Villaviciosa, tiene el interés de ser uno de los escasos ejemplos de templos prerrománicos que no son promovidos por la realeza asturiana. La iglesia se consagra al Salvador el 23 de septiembre de 921 y se atribuye su fundación a un presbítero de nombre Juan. En una de las puertas vemos un cartelito indicando que las llaves están en la casa de enfrente, pero cuando llamamos no nos contesta nadie y nos quedamos sin poder visitar el interior. Aquí ya podemos ver los rasgos característicos del prerrománico asturiano: planta basilical con cabecera cuadrada, ventanas geminadas, la cámara del tesoro sobre la capilla central con su ventana geminada y las celosías de piedra en las ventanas simples.
Núcleo rural de Priesca.
Vistas hacia la Ría de Villaviciosa.
San Salvador de Priesca (S.X).
Cabecera de la iglesia.
Portal principal.
Ventana geminada con alfiz.

San Salvador de Valdediós.

En el recinto del Monasterio de Santa María de Valdediós se encuentra la iglesia de San Salvador, también conocida como "El Conventín". La visita (6,5€) se realiza mediante una audioguía que también incluye la iglesia y el claustro del monasterio.
El Conventín es la única construcción que perdura del conjunto palatino mandado construir por Alfonso III el año 875. Presenta la característica planta basilical de tres naves cubiertas con bóveda de medio cañón, tres capillas en la cabecera y una tribuna a los pies. La capilla central está delimitada por un arco ligeramente ultrapasado sustentado por dos columnas con capiteles decorados con hojas de acanto, alrededor del arco y en las paredes de la capilla se conservan algunos restos de la decoración pictórica original. Todas las ventanas geminadas tienen arcos de herradura y un alfiz decorado. Llama la atención la altura de la nave central iluminada por dos series de cuatro ventanas geminadas en la parte superior.
San Salvador de Valdediós "El Conventín" (S.IX).
Fachada sur con el pórtico real.
Fachada norte.
Exterior de la cabecera.
Ventana tripartita de capilla central.
Ventana geminada de la cámara sobre el altar.
Portal de acceso a los piés de la iglesia.
Ventana geminada sobre la entrada.
Detalle de uno de los capiteles de la entrada.
Capilla central con restos de pinturas.
Capitel de una de las columnas de la capilla central.
Detalle de los restos de pintura mural.
Nave central con la tribuna.
El Pórtico Real adosado a la fachada sur.
El monasterio cisterciense de Valdediós fue construido el año 1218, según consta en la inscripción del tímpano de la entrada del transepto norte de la iglesia, donde también aparece el nombre del constructor: el maestro de obras Gualterio. La iglesia es de estilo tardorrománico, con una sobria decoración según marcan los cánones de la regla cisterciense. Consta de tres naves cubiertas con bóvedas de crucería y un transepto que sobresale ligeramente de las naves laterales. Cada una de las naves tiene su correspondiente portada a los pies donde sí que hay algo más de decoración que no en el interior, aún se conservan restos de policromía en portada de la nave central. El claustro original románico fue sustituido por el actual renacentista, del original sólo se conserva la puerta de acceso al interior de la iglesia.
Monasterio de Santa María de Valdediós (S.XIII).
Cabecera de la iglesia.
Portada de la nave central.
Figuras orantes en unos de los capiteles.
Curiosa cara en otro de los capiteles.
Portada de la nave norte.
Portada de la nave sur en el interior del claustro.
Entrada del transepto norte, la "Puerta de los Muertos".
Detalle del arco con la inscripción de la fecha de construcción.
Nave central con bóveda de crucería.
Ábside de la nave sur.
Puerta de acceso a la iglesia desde el claustro.
Claustro renacentista.
La sencilla Sala Capitular.

Santa María de Bendones.

En la aldea de Bendones a las afueras de Oviedo se encuentra esta otra pequeña iglesia que sólo podemos visitar exteriormente. Aunque no está datada con exactitud, se estima que es una construcción del S.IX bajo el reinado de Alfonso II, Durante la guerra civil sufrió grandes daños que acabaron con un incendio en el año 1936, con lo que la iglesia se derrumbó parcialmente y se reconstruyó el año 1954. Tiene una sola nave longitudinal con la cabecera tripartita y una nave transversal de mayor altura que la principal. En la cabecera vemos la típica ventana tripartita que daba acceso a la cámara sobre el altar, las columnas y el alfiz son las piezas originales, también es original el pórtico de los pies. Completa el conjunto una torre-campanario exenta reconstruida sobre el zócalo de la original.
Santa María de Bendones (S.IX).
Fachada norte.
Ventana tripartita de la cámara en la cabecera.
Fachada sur con la torre-campanario.

Oviedo capital.

En lo que es propiamente el casco urbano de Oviedo capital no hay muchos monumentos prerrománicos. San Julián de los Prados está situada en un parque no muy lejos del centro y por cuestión de horarios no podemos visitar el interior, es una lástima ya que mantiene parte de la decoración pictórica original, por lo demás su estructura es la clásica del prerrománico: tres naves longitudinales con sus capillas en la cabecera con las ventanas de celosía de piedra y la ventana tripartita de la cámara sobre la capilla central.
Dentro del recinto de la Catedral de Oviedo está la Cámara Santa (S.IX), a su interior se accede en el recorrido de la catedral. Actualmente es donde se exponen las reliquias y las piezas más significativas del tesoro de la catedral como la Cruz de la Victoria, la Cruz de los Ángeles, el Santo Sudario y otras piezas curiosas como la sandalia del pie derecho de San Pedro. Justo bajo la Cámara Santa se encuentra la Cripta de Santa Leocadia a la que se accede desde el claustro y que suele pasar bastante desapercibida.
En la Plaza de la Catedral se encuentra la iglesia de San Tirso, de la construcción original del S.IX tan solo se conserva la cabecera con un arco tripartito actualmente cegado. El último vestigio prerrománico de Oviedo capital es la Fuente de Fontcalada (S.IX), es la única edificación de carácter civil de uso público que ha sobrevivido del prerrománico y es una lástima como ha quedado rodeada de edificios modernos.
San Julián de los Prados o Santullano (S.IX).
Cabecera de San Julián de los Prados.
Cabecera de la iglesia de San Tirso (S.IX).
Exterior de la Cámara Santa (S.IX).
Interior de la Cámara Santa.
Arqueta de las Ágatas (Rey Fruela II, año 910).
Cruz de la Victoria (Rey Alfonso III, año 908).
Cruz de los Ángeles (Rey Alfonso II, año 808).
El Santo Sudario.
La sandalia de San Pedro entre otras reliquias.
Cripta de Santa Leocadia bajo la Cámara Santa.
Fuente Foncalada (S.IX).

San Pedro de Nora.

En uno de los meandros del río Nora tras su confluencia con el Nalón, en un entorno realmente bucólico, se encuentra la iglesia de San Pedro de Nora. Esta iglesia fue construida bajo el reinado de Alfonso II el Casto durante el siglo IX y resultó incendiada durante la Guerra Civil, siendo reconstruida el año 1950. Es de planta basilical ligeramente trapezoidal con tres naves con cubierta de madera a dos aguas y rematadas por capillas cuadradas en la cabecera, en el exterior de la cabecera se dispusieron unos contrafuertes para dar solidez a las bóvedas de las capillas. La torre campanario exenta es un "invento" de la restauración del 1950 ya que no había ninguna evidencia de la misma.
San Pedro de Nora (S.IX).
Vista general.
Interior del vestíbulo de entrada.
La torre-campanario exenta.
Cabecera con la ventana de la cámara y celosías de las capillas.
Meandros del Nora.