domingo, 28 de febrero de 2021

El Camí del Riu. El Mediona, el Bitlles y l'Anoia

El Camí del Riu es una iniciativa conjunta de los municipios de Sant Sadurní d’Anoia, Subirats, Torrelavit, Sant Pere de Riudebitlles, Sant Quintí de Mediona y Mediona, para preservar y mejorar los espacios fluviales de los ríos Mediona-Bitlles, Anoia y Avernó. El recorrido señalizado es una ruta lineal de 43 quilómetros, para realizar a pie o en bicicleta, desde Sant Joan de Mediona hasta Can Cartró, cerca de Subirats. Decido dejar de lado el tramo entre Sant Joan y Sant Quintí de Mediona, saliendo de la estación de tren de Lavern-Subirats y subir hasta Sant Quintí pasando por el Pla del Penedès.
Estación de Lavern-Subirats.
Iglesia neorrománica de Sant Pere de Lavern.
Can Bas.
Sant Joan Salerm.
Al cruzar la Riera de l'Avernó poco antes de llegar a Can Cartró, abandono la ruta señalizada para dirigirme hacia el Pla del Penedès. Una vez superada la rampa para salir de la riera el camino discurre entre viñas por la Serra del Gat, a pesar del nombre es una zona muy plana y agradable para rodar. Sin entrar al Pla del Penedès me dirijo hacia Sant Quintí de Mediona, pasando por la bodega Jean León y el Miravinya La Cadira, donde hago una parada para disfrutar del paisaje.
La Serra del Gat camino al Pla del Penedès.
Bodega Jean León.
Miravinya La Cadira.
Vista hacia Sant Pere de Riudebilles.
De Can Claret hasta el enlace con la carretera de Sant Quintí logro evitar el tráfico por el camino de servicio de la C-15, pero entonces no queda más remedio que seguir la carretera durante un quilómetro hasta llegar al camino que lleva al Molí Paperer de Ca l'Oliver. Este molino ya se menciona el año 1703 y el 1775 consta que tenía dos molinos de papel blanco, dos de papel de estraza, y un molino de harina. El 1871 se construyó el edificio que se ve ahora, ya dedicado íntegramente a la producción textil. Como cosa curiosa se puede ver una de las piedras del molino de harina, reaprovechada en uno de los muros de las casas. Cruzo el Mediona por un puente y por el Camí de la Bòria continúo por el margen izquierdo del río, pasando por el antiguo lavadero público del pueblo, hasta llegar a Les Deus.
Molí Paperer de Ca l'Oliver.
Les Cases de Ca l'Oliver.
Piedra de molino reaprovechada en una pared.
Puente sobre el Riu Mediona en Sant Quintí.
Camí de La Bòria.
Lavadero público de Sant Quintí.
Aparco la bicicleta en la Font de Les Deus y me doy una pequeña vuelta para ver los Pèlags de Les Deus y la Cova del Barris. Lo único que encuentro abierto es el Parc d'Aventura Les Deus así que no me entretengo mucho e inicio lo que sería propiamente el Camí del Riu en dirección a Sant Sadurní d'Anoia. Antes de salir de Sant Quintí me desvío para subir a la Ermita de Sant Antoni. Está dentro del recinto del cementerio y resulta bastante decepcionante, ya que son puras ruinas sin mucho interés. De vuelta al recorrido enseguida se abandona la carretera para coger el Camí de les Nogueres -totalmente asfaltado- hacia Sant Pere de Riudebitlles. En este tramo se ven muchas acequias y canales para el aprovechamiento agrícola e industrial del agua, llama la atención el acueducto Pont dels Valls a la entrada del pueblo.
Les Fonts de Les Deus.
Pèlags de Les Deus.
La Cova del Barris. 
Plafón informativo del Camí del Riu.
Ermita de Sant Antoni.
Acueducto Pont dels Valls y la fábrica al fondo.
En Sant Pere de Riudebitlles el itinerario te lleva por el exterior del pueblo en dirección hacia Torrelavit pasando por Terrasola, donde paro para ver la iglesia románica de Sant Marçal de Terrasola (S.XI). Si algo encuentro en falta a la señalización del itinerario, son indicaciones de sitios para visitar como este. En Torrelavit lo único señalizado es el Centre d'Interpretació de l'Aigua pero está cerrado. En Torrelavit termina el camino asfaltado y se continúa por tierra, resiguiendo el cauce del Bitlles hasta pasar por detrás de la bodega Segura Viudas. El olor de la depuradora de la bodega quita bastante encanto a este tramo que, sin embargo, es muy bonito.
Sant Marçal de Terrasola.
Fachada sur.
Detalle del arco de entrada.
Cabecera con triple ábside y cimborrio octogonal.
Bajando a cruzar el Bitlles.
Bordeando la bodega Segura Viudas.
Una vez pasado Segura Viudas el camino se bifurca, a pie continuaría resiguiendo el cauce del Bitlles, y en bicicleta te dirige de subida hacia Cal Cardús, para llegar al Riu Anoia a la altura de Can Romeu y Can Catasús. El primer cruce del Anoia es por la Passera del Molinot y más adelante por el vado de Can Codorniú. El recorrido original evita este vado siguiendo el margen izquierdo del río para ir a parar a un polígono industrial bastante feo. Yo prefiero cruzarlo para pasar por delante de las Caves Codorníu y los restos del Roure de Can Codorníu. La ruta la termino en la estación de tren de Sant Sadurní d'Anoia, justo delante de otra de las grandes empresas cavistas de la zona, las Caves Freixenet.
Camíno por Cal Cardús.
Bajada hacia el Riu Anoia.
Passera del Molinot.
Vado de Can Codorníu sobre el Riu Anoia.
Caves Codorníu.
Los restos del Roure de Can Codorníu.
Puente sobre la Riera de l'Avernó.
Caves Freixenet.
Ha sido una ruta muy entretenida y variada, aunque si tuviera que repetirla incluiría algún punto de interés como el Palau dels Marqueses de Llo en Sant Pere de Riudebitlles, el Molí Cubé y el Centre d'Interpretació de l'Aigua en Torrelavit, o alguna de las muchas bodegas y cavas de la zona.
Distancia: 36,8 Km.
Desnivel acum.: +413 mts. -449 mts.

domingo, 21 de febrero de 2021

Ronda de Font-rubí en BTT

Tras estas semanas en que solo podía salir con la bicicleta por el municipio y limítrofes, hoy puedo hacer una buena ruta dentro de los límites comarcales y me decido por hacer la Ronda de Font-rubí. Esta ruta la realicé hace siete años saliendo desde casa y la recuerdo muy bonita. Esta vez opto por salir de Guardiola de Font-rubí para seguir el trazado "oficial", subiendo por La Carrerada en vez de por La Maçana y Can Grau.
Todo este primer tramo del recorrido, no se me hace especialmente duro. El camino está en buen estado y la pendiente no es excesiva, salvo algún que otro corto repecho más empinado. Lo subo de un tirón y la primera parada la hago en el Roure de Santsuies, poco antes de llegar a Les Cases Noves.
La Carrerada saliendo de Guardiola.
El Mas Moió.
Roure de Santsuies.
Buena señalización en todo el recorrido.
Font-rubí entre nubes bajas.
Les Cases Noves.
El tramo de pista asfaltada que sube hasta Font-rubí es el de más pendiente y más continuada del recorrido. Solo es cuestión de echarle paciencia, cojo un buen ritmo y tampoco sufro tanto como me esperaba. En la última curva antes de llegar al núcleo de Font-rubí se deja la pista asfaltada, y se continúa por el camino que va flanqueando la Serra del Bolet por debajo de la carena. Es una delicia de camino para rodar, alternando subidas y bajadas suaves entre el bosque, y siempre con unas estupendas vistas sobre la plana del Penedès, donde parece que quiere empezar a lucir el sol. Por el camino voy pasando indicadores de las diferentes cuevas que hay por la zona, la Cova del Toixó, la Cova de l'Arena, la Cova del Bolet... habrá que venir a visitarlas algún día.
Camino por la Serra del Bolet.
Una barraca a pie de camino.
Parece que despeja por la plana.
Bosque de pinos y encinas.
Toda la ruta está muy bien señalizada, y solo me equivoco en un desvío poco después de la masía del Bolet. En este desvío toca empezar a bajar por un sendero algo más complicado que las pistas por las que he ido rodando hasta ahora. Al llegar al Torrent de Valdellós sigo recto en dirección a Les Clivelleres, ya que el paso por el torrente está restringido entre Enero y Junio por la nidificación del águila cuabarrada (aquila fasciata). Esta variante también tiene la ventaja de que el camino es más ciclable que no el que baja por el torrente, con todo y que en algunos tramos -antes de enlazar otra vez con la ruta original- la pista está bastante deshecha y hay que tirar de frenos. Una vez pasada la masía de Les Pereres el paisaje y las pendientes se vuelven a suavizar.
Algún tramo más difícil.
Bajada por la variante de Les Clivelleres.
En elTorrent de Valdellós.
Otra vez entre viñas y masías.
Entre viñas y masías voy bajando hasta llegar a Sant Vicenç del Morrocurt. Esta iglesia románica (S.XII) se derrumbó el año 1992 durante una tormenta... y así ha quedado. Solo ha sobrevivido el ábside, el resto puras ruinas y abandono. Según el plafón explicativo debería haber una pila bautismal bastante interesante, pero esta ha desaparecido... ¡ojalá la hayan retirado para preservarla! en caso contrario, sería otro caso más de expolio del patrimonio por dejadez de las administraciones.
Sant Vicenç del Morrocurt.
El ábside con decoración lombarda.
La nave totalmente en ruinas.
La cabecera aún aguanta en pie.
Continúo bajando hasta Santa María de Bellver, y de ahí sigo la ruta hasta llegar a la entrada de Puigdàlber. Ahora toca bajar para cruzar el Torrent de Can Colomer y volver a subir hasta enlazar de nuevo con La Carrerada. Aquí es donde empiezo a notar los kilómetros que llevo y, sobre todo, el viento de levante que ha empezado a soplar y fastidia bastante. Por suerte todo el tramo que me queda es asfaltado y muy suave, solo tengo que echarle paciencia para llegar al punto de partida.
Santa María de Bellver.
Por La Carrerada de vuelta.
A la altura de Grabuac.
Final del recorrido en Guardiola.
Distancia: 37,4 Km.
Desnivel acum.: +647 mts. -647 mts.