domingo, 28 de abril de 2019

De La Llacuna al Castell de Vilademager

Domingo perfecto para salir a caminar cerca de casa, con un sol radiante y una temperatura muy agradable. Nos vamos hasta La Llacuna para visitar otro de los castillos de la Anioa, el Castell de Vilademàger. Saliendo del pueblo por el Carrer del Castell, una pista cimentada a tramos nos lleva hasta el cementerio municipal y luego continúa hacia el Camping Vilademàger. En poco rato ya vemos la iglesia de Sant Pere de Vilademàger entre el bosque de pino blanco y llegamos a un desvío muy bien señalizado... a la izquierda hacia el camping y a la derecha hacia al castillo, no hay pérdida.
Salimos de La Llacuna un poco tarde, las once.
Camino cimentado a tramos.
Aparece la iglesia de Sant Pere de Vilademàger.
Desvío señalizado, no hay pérdida.
La pista que vamos siguiendo lleva hasta el mismo castillo dando la vuelta por la derecha del mismo. Sin embargo nosotros decidimos tomar un desvío (300 metros a la izquierda y señalizado como PR-4) por un sendero que va subiendo por debajo del risco del castillo hasta llegar a la puerta de acceso original. Desde luego mucho más agradable que la pista por la que íbamos y da la impresión que debía ser el camino original, ya que hay restos de empedrado y lleva directamente a la puerta de acceso.
Sendero PR-4 que sube hacia el castillo.
Balma bajo el risco del castillo.
Pasando por debajo de los restos de la muralla.
Acceso empedrado a la puerta principal.
Puerta principal del recinto amurallado.
¿Hay alguien en casa?.
El castillo de Vilademàger ya aparece mencionado el año 987, bajo el dominio de la casa condal de Barcelona. Fue custodiado por los señores del castillo de Queralt y el linaje de los Cervelló, que ostentaron el título de barones de la Llacuna. La iglesia original de Sant Pere de Vilademager correspondería al S.XII o anterior, pero fue totalmente reformada en el S.XIV. La entrada está situada en la fachada norte, un arco de medio punto con grandes dovelas sin más decoración que un guardapolvo, una imposta lisa y una sencilla moldura en las esquinas del dintel. La encontramos cerrada pero, tras alguna que otra contorsión, consigo hacer una foto del interior a través de la gatera de la puerta.
Del primer recinto del castillo (S.X-XI) quedan los restos de la torre, de una cisterna y algunos muros interiores, que han sido excavados y consolidados recientemente. La puerta y muralla por la que hemos accedido al recinto corresponderían a una ampliación del recinto original, posiblemente de la misma época que la reforma de la iglesia.
Sant Pere de Vilademàger y la torre del castillo detrás.
Vistas hacia La Llacuna.
Fachada norte de la iglesia.
La única decoración del arco de la entrada.
El interior visto a través de la gatera.
Osario con todos los restos del antiguo cementerio.
Ábside poligonal.
Restos de la cisterna del primer recinto del castillo.
La torre de defensa del primer recinto.
Reconstrucción del primer recinto (www.parpatrimonio.com).
Del castillo seguimos por una pista sin asfaltar que llega hasta lo alto de la Serra d'Ancosa, donde enlazamos por el camino que la recorre hasta la carretera de La Llacuna. Este resulta el tramo más relajado de toda la salida de hoy, el camino va llaneando sin casi ganar ni perder altura, la primavera ha hecho reverdecer todas las plantas, y el aire está lleno del olor de la ginesta y el romaní en flor... ¡terapia perfecta para el estrés!. Poco después de pasar un depósito de agua, tomamos un desvío a la derecha para bajar por el Bosc del Paradís. Parece que han estado desbrozando el bosque últimamente, ya que el camino está algo estropeado, lleno de troncos y restos de ramas, pero se baja sin ningún problema.
Vista hacia la Plana de Les Llambardes y la Serra del Bolet.
Por el camino que sigue la carena de la Serra d'Ancosa.
Ginesta en flor.
Unos abejorros en el romaní en flor.
Depósito de agua en la carena.
Camino de bajada por el Bosc del Paradís.
Al final de la bajada por el Bosc del Paradís llegamos a la Font Cuitora, un espacio muy bien arreglado y presidido por dos enormes álamos blancos. El nombre le viene de que, por su baja mineralización, el agua de esta fuente es muy buena para cocer legumbres según la gente del pueblo. Es un buen lugar para descansar un rato antes de continuar hacia La Llacuna siguiendo la pista, amplia y en buen estado.
El entorno de la Font Cuitora.
La Font Cuitora.
Uno de los álamos blancos está apuntalado.
El otro está en muy buen estado de salud.
Camino de vuelta a La Llacuna.
De vuelta en La Llacuna.
Antes de volver a casa nos damos una vuelta por el centro de La Llacuna. En la edad media era una villa amurallada y se nota en el trazado de las calles, también se han conservado algunos de los portales de acceso. La Plaça Major mantiene los porches medievales y, en general, todo el centro lo tienen muy bien arreglado.
Plano turístico de La Llacuna.
Portal d'en Garreta.
La Plaça Major de La Llacuna.
La han dejado muy bien arreglada.
Portal de la Banya.
Portal de la Banya desde el exterior.
Distancia: 7,5 Km.
Desnivel acum.: +254 mts. -254 mts.

jueves, 18 de abril de 2019

Pics de Pessons (2.863 msnm) y Montmalús (2.780 msnm) con esquís

Este invierno ha sido de lo más extraño, mucha nieve en octubre, luego tres meses casi sin llover ni nevar, y finalmente unas nevadas primaverales que han arreglado algo la temporada. Con un pronóstico meteorológico no demasiado favorable nos vamos a la zona de Andorra, para una travesía de dos días saliendo de la estación de esquí de Grau Roig.
Empezamos siguiendo el itinerario que han señalizado entre el bosque hasta el Estany Primer de Pessons, donde terminan las pistas de esquí, a partir de aquí vamos remontando el largo Circ de Pessons hasta llegar debajo de la abrupta cara este del Pic de Pessons. En el último estany  empezamos a flanquear por la izquierda para ganar altura y entrar en la Canal dels Isards.
El Pic de Pessons con la Canal dels Isards a su izquierda.
En el itinerario señalizado por la estación de esquí.
El Pic de Montmalús desde el Circ de Pessons.
¡Parece que quiere salir sol!
Cornisas en la cresta del Pic de Pessons.
Flanqueando para entrar en la Canal dels Isards.
La Canal dels Isards va ganado inclinación hasta llegar a algo más de cuarenta grados en su punto más estrecho. La nieve está en buenas condiciones y eso nos permite subirla sin tener que sacarnos los esquís, eso sí, con algunos giros algo forzados en el punto más estrecho. Tan solo la cornisa de la salida al collado nos plantea un poco más de dificultad, pero por la izquierda la superamos sin demasiados problemas. Del collado a la cima también logramos subir con los esquís puestos, arrimándonos con cuidado a la cornisa y sorteando alguna que otra calva en la nieve.
En la parte más empinada... la nieve aguanta bien.
Ya se empieza a abrir y pierde inclinación.
Debajo de la cornisa final.
Toca negociar la salida como se puede.
La estación meteorológica de la cresta.
En la cima preparándome para el descenso.
No nos estamos mucho rato en la cima ya que hace bastante viento y, aunque a ratos parecía que quería salir el sol, se mantiene el día gris. Con esa luminosidad extraña que no deja ver bien el relieve de la nieve empezamos el descenso hacia el refugio, nos sorprende la excelente calidad de la nieve que compensa la falta de visibilidad... ¡todo un regalo que disfrutamos como enanos!.
Francisco petando las palas superiores del Pessons.
Disfrutando la sorpresa del día.
Llegando al refugio.
El magnífico Refugi de l'Illa.
Panorámica hacia el sur desde la terraza del refugio.
El Refugi de l'Illa es magnífico y la cordialidad y atención de los guardas excelente. Coincidimos con tan solo un grupo de tres vascos la mar de simpáticos, excepto Francisco todos pintamos canas y pasamos el rato hasta la hora de la cena contando batallitas. Mañana tienen previsto hacer el mismo recorrido que nosotros por lo que iremos juntos, aunque cada uno a su ritmo.
Cuando nos levantamos por la mañana, vemos que el día ha amanecido igual de gris que ayer. Desayunamos tranquilamente, nos despedimos de los guardas, y nos ponemos en marcha con la esperanza de no mojarnos. Del refugio al Port de Vallcivera hay apenas un centenar de metros de desnivel, una vez arriba nos preparamos para el primer descenso de hoy. La primera pala tiene una buena pendiente pero es lo suficientemente amplia como para bajarla sin problemas, luego solo tenemos que dejarnos deslizar valle abajo disfrutando del paisaje del Pla de Vallcivera.
El día se ha levantado gris, igual que ayer.
Llegando al Port de Vallcivera.
Sacando pieles en el Port de Vallcivera.
El grupo de vascos bajando la pala superior.
Un pequeño estany en el Pla de Vallcivera.
Vamos a buscar el torrente que baja del Estany de Montmalús.
Al final del Pla de Vallcivera vamos a buscar el torrente que desagua los Estanys de Montmalús. Aquí se complica un poco la progresión ya que hay que ir buscando los pasos de nieve entre el bosque. Al final decidimos subir por el fondo mismo del torrente, a pesar de ser estrecho y haber de tener cuidado de no hundir algún puente de nieve sobre el río, es donde hay más nieve acumulada.
Una vez llegamos al Estany de Montmalús seguimos en dirección al Coll de Montmalús, la pendiente es mucho más suave que la que hicimos ayer en la Canal dels Isards y con unos cuantos giros nos plantamos en el collado, donde coincidimos con toda la gente que sube desde Grau Roig. Dejamos los esquís y nos acercamos a la cima, foto en la misma y de vuelta al collado.
Remontando el torrente.
Hay que buscar un poco la nieve para progresar.
Saliendo del torrente, al fondo el Pic de la Muga.
En el primer estany ya aparece al fondo el Montmalús.
Remontando las palas del Coll de Montamalús.
¡Ya casi que estoy!
En el Coll de Montmalús.
Foto de cima en el Montmalús.
El descenso desde el Coll de Montmalús por la Coma Estremera hasta las pistas, y luego por estas hasta el aparcamiento, es de unos 700 metros de desnivel. La nieve se presenta en muy buenas condiciones, primavera pero no muy pesada, y además empieza a salir el sol... ¿que más se puede pedir?. Nos lanzamos desde el collado y disfrutamos al máximo enlazando giro tras giro casi sin parar. Un magnífico final para esta travesía de dos días por el Pirineo Andorrano.
Descenso por la Coma Estremera.
Francisco marcando estilo... como siempre.
Panorámica desde el aparcamiento en que se ven las dos cimas que hemos hecho en estos dos días.
Pic de Pessons (2.863 msnm).
Pic de Montmalús (2.780 msnm).
Distancia: 16,4 Km.
Desnivel acum.: +1.314 mts. -1.314 mts.