Pica del Carlit (2.921 msnm) por Les Bouillouses

Al Carlit le corresponde el honor de ser la cima más alta de la Cerdanya y también del Pirineo Oriental, superando por tan solo 8 metros al Puigmal. La ascensión clásica por Les Bouillouses es larga, en realidad todas sus rutas lo son, y además tiene la característica de que la mayor parte del desnivel se concentra en los últimos kilómetros. De Les Bouillouses hasta el Estany Sobirà hay unos 6 kilómetros en los que tan solo ganamos unos 350 metros de altura. El resto, hasta los algo más de 900 metros de desnivel total, se suben en poco más de 1,5 kilómetros.

La presa de Les Bouillouses.	El ganado aprovecha el sol de primera hora.
El Estany de Viver.	Pasando el Estany Sec.

Aparcamos en el Pla de Barres, ya que el acceso lo cierran en verano y hay que coger el autobús para llegar a Les Bouilloses (5 €). Cuando nos ponemos a caminar a las 10 aún hace frío y sopla viento de norte, esto hace que las nubes queden enganchadas en la cumbre del Carlit. Confiamos ciegamente en la previsión meteorológica y tiramos para arriba. Vamos pasando por la zona lacustre a buen ritmo y en dos horas nos plantamos en el Estany Sobirá. Aquí empieza la subida de verdad con un primer repecho que nos deja en el Estanyol Glaçat.

Las nubes de norte aún se mantienen enganchadas.	El Estany Sobirá.
Empieza la subida hacia el Estanyol Glaçat.	En el Estanyol Glaçat.

En el Estanyol Glaçat vemos que poco a poco va despejando y continuamos hasta el Coll Colomer, donde definitivamente se abre el día, aunque se mantiene la temperatura bastante fresca. El camino está bien marcado y no tiene pérdida, flanquea por debajo de la Pica del Carlit hasta llegar a una canal pedregosa que baja de la cresta norte y luego un pequeño tramo de arista sin dificultad hasta la cima.

Poco a poco va despejando.	Tramo final desde el Coll Colomer, ¡el Carlit ya despejado!.
El Carlit de Baix aún está cubierto.	Restos de hielo de la tormenta de ayer.

El tramo del Coll Colomer a la cima es el que tiene más pendiente y en algunos pasos hay que trepar un poco y ayudarse de las manos, quizás el mayor peligro es que alguno de los que van por delante tire alguna piedra. Lo poco de nieve fresca y el hielo que aún se mantiene en las rocas le dan algo más de ambiente a la subida.

Entre el Coll Colomer y la canal.	¡Cuidado con las piedras!
En la canal pedregosa que da acceso al collado.	La cima del Carlit.
Disfrutando del sol en la cima.	La presa de Llanós hacia el Oeste.
Les Bouillouses hacia el Este. Al fondo aparece el Canigó.	El Pic de la Serra de les Xemeneies.

Nos estamos un buen rato en la cima, las fotos de rigor en todas las direcciones y empezamos la bajada. Bajamos de un tirón hasta el Estany Glaçat donde hacemos una parada para descansar un poco y quitarnos la chaqueta.

De vuelta hacia el collado.	Vista hacia el Desert del Carlit.
Pic de la Serra de les Xemeneies desde Coll Colomer.	Bajando hacia el Estanyol Glaçat.
Vista del Carlit dominando la coma del Estanyol Glaçat.

El resto de la bajada la hacemos por los Estany de Trebens, Gombau, del Castellat, Les Dugues y del Viver, donde enlazamos con el camino que hemos seguido a la subida.

El Estany Sobirá, tiene la forma del continente africano.	Vista del Carlit desde el Estany de Trebens.
La bajada vuelve a ser suave.	Disfrutando del buen día.

Salvo un pequeña parada para descansar al sol y comer algo, bajamos "a piñón", adelantando a los grupos de turistas que han subido a ver los estanys. 

Vamos cruzando pequeños arroyos.	De bajada hacia el Estany de Viver.
Los Perics dominan el Estany de Viver.	De vuelta a Les Bouillouses.

De vuelta a Les Bouillouses nos tomamos una cerveza bien fría antes de coger el autobús de bajada. Han sido unas siete horas de caminar que bien se merecen un pequeño premio.

Distancia: 15,2 Km.
Desnivel acum.: +926 mts. -926 mts.