miércoles, 28 de marzo de 2018

De Castellcir a Collsuspina y las Coves del Toll

Una de las comarcas por las que aun no había pedaleado es la del Moianès así que, tirando de wikiloc, miro posibles rutas hasta que encuentro algunas que parecen interesantes, solo queda empalmar tramos de una con otra y listo. Salgo de Castellcir en bajada hacia la Riera de Castellcir para empezar a remontarla hasta el Torrent de Centelles, donde la dejo para subir al Castell de Castellcir o de la Popa.
En este primer tramo ya veo cual va a ser la tónica de esta salida, agua por todos lados. La riera baja con un caudal abundante y el camino está bastante lleno de charcos y pequeñas corrientes de agua que manan de todos los taludes. La subida al castillo no me presenta más dificultad que la última rampa en que el camino se convierte en un sendero bastante roto, apenas cien metros pero que me obligan a echar pie a tierra para superarlo.
Bajando a la Riera de Castellcir.
Camino por el valle del Torrent de Centelles.
Última rampa para llegar al castillo.
El Castell de Castellcir o de la Popa... ¡evidentemente!
Con la primera vista del castillo se hace evidente el porqué del nombre de Castell de la Popa, ya que la roca sobre la que está edificado recuerda a un barco. Este castillo aparece mencionado ya en el año 1.014 en la documentación de Sant Benet de Bages y estuvo habitado hasta mediados del S.XX. Actualmente solo se mantiene en buenas condiciones la sala de la entrada en el torreón principal y poco más.
Escaleras de acceso al torreón principal.
La sala de la entrada, aun en muy buen estado.
Restos de la Capella de Sant Martí de la Roca.
Fachada este del torreón principal.
Hacie el este el Montseny bien nevado.
Hacia el norte aparece el Pirineo.
Tras visitar las ruinas del castillo empiezo la bajada de vuelta a la Riera de Castellcir, la hago por el camino que sube por la banda opuesta a la que he subido; es una bajada muy divertida que discurre todo el rato por buena pista. De vuelta al fondo de la riera, la pista va subiendo de forma suave pero continuada, cruzando varias veces la riera. Como el caudal es abundante, en alguno de los cruces me termino mojando los pies... nada que no esté asumido cuando sales en bicicleta.
Vista del castillo desde la bajada.
Cruce sobre la Riera de Castellcir.
Restos de un pozo de hielo.
Camino remontando la Riera de Castellcir.
Casi al final de la riera toca afrontar unas rampas bastante pronunciadas para subir a la Serra de Santa Coloma. El hecho de estar en parte asfaltadas ayuda mucho a coger el ritmo, una vez alcanzada la parte superior de la carena la pendiente se suaviza, y poco después ya se empieza a bajar hacia Collsuspina.
Masía El Bonifet.
Camino por la Serra de Santa Coloma.
Inicio de la bajada a Collsuspina.
Masía l'Espina.
Un buen descanso en Collsuspina y comienzo el camino de vuelta. La mayoría de tracks que he consultado van a buscar un sendero que baja directamente por el Torrent del Gomar hasta las Coves del Toll pero, vista la cantidad de agua que baja hoy por todos lados, decido bajar por el Camí de l'Espinoi. Este camino baja por la carena entre dos rieras, es amplio, de muy buen rodar... ¡y además está seco!.
Collsuspina.
Por las callejas cerca de la iglesia.
Una imagen bucólica.
Por el Camí de l'Espinoi hacia las Coves del Toll.
Ahora toda la zona de las cuevas está muy arreglada ya que es un Parque prehistórico con un centro de recepción, visitas guiadas a la galería sur, unas reproducciones de cabañas prehistóricas... todo muy bien preparado para los turistas. Nada que ver con lo que yo recordaba, un lugar solitario en el que podías acampar y también recorrer la galería sur "por libre". El camino habilitado para turistas pasa por las cabañas y por delante de la Cova de la Surgència; un poco más adelante un cartel advierte que termina el recinto del parque, ahí mismo comienza un sendero que baja por el margen derecho del Torrent del Gomar.
Centro de recepción de Les Coves del Toll.
Entrada de la galería sur.
Reproducción de cabañas prehistóricas.
Muy bien trabajadas.
La Cova de la Surgència.
Baja mucha agua de la cueva.
Este tramo de sendero, aunque estrecho, es muy divertido de bajar y el entorno de la riera con sus saltos de agua vale mucho la pena. Termina enlazando con una pista que cruza al otro margen y se enfila hacia la misma carena que he dejado antes para bajar a las cuevas. Tanta felicidad no puede durar para un ciclista que se precie, la subida está muy embarrada y poco a poco las ruedas van acumulando peso, más y más peso... finalmente no queda otra que arrastrar un rato la burra hasta llegar a la masía de La Tuta, donde el camino vuelve a estar seco. Ahora viene una larga bajada por pista hacia Castellterçol, larga y muy agradable, el paisaje me hace venir a la cabeza la canción de los Beatles "The long and winding road".
El Torrent del Gomar.
Salto de agua del Gorg de les Olletes.
¡Con razón pesa tanto la burra!
The long and winding road.
Casi a la entrada de Castellterçol me desvío por el camino que sube por la Riera de Fontsacalents, me evitará el tramo de carretera que lleva a Castellcir y además pasa por otro bonito lugar, el Mas d'Esplugues. Es un conjunto de edificaciones construidas aprovechando una gran balma, actualmente hay un centro del Ecomuseo del Moianès. El entorno con los prados al lado de la masía y el puente - que no parece llevar a ningún lado - conforman un paisaje casi como si de un pesebre navideño se tratase.
Castellterçol a la vista.
Riera de Fonsacalents.
El Mas d'Esplugues.
Pont d'Esplugues.
Del Mas d'Esplugues hasta Castellcir solo quedan dos kilómetros por pista, toda cuesta arriba y para nada suave, o al menos así me lo parece... al final este es el tramo que se me hace más largo de toda la salida.
Distancia: 30,7 Km.
Desnivel acum.: +612 mts. -612 mts.

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