Viladrau, el Castanyer de les Nou Branques (SL-C 81)

Viladrau es tierra de leyendas de brujas y bandoleros, bosques... y agua, mucha agua. El sendero señalizado SL-C81 "Sender del Castanyer de les Nou Branques" es un recorrido muy asequible que combina perfectamente todos esos ingredientes. Nos ponemos a caminar delante del ayuntamiento y vamos a buscar el Carrer Nou que - irónicamente - es una de las calles más antiguas de Viladrau. Este desvío nos permite visitar dos de las muchas fuentes urbanas de Viladrau, la Font del Sot de la Valls y la Font Jacinta. Tras pasar por la Plaça Major y la Capella de la Pietat pasamos por la Font de Miquel, aun dentro de la zona residencial de Viladrau.

El Carrer Nou.	Font del Sot de la Valls.
Font Jacinta.	Mejor no hacer mucho caso de los horarios.
Capella de la Pietat.	Font de Miquel.

Ya fuera del pueblo solo hay que seguir los indicadores, como todos los itinerarios que ha marcado el Parc Natural del Montseny este también es a prueba de turistas. Enseguida llegamos a la Font de les Paitides, de todas las que veremos hoy es la más concurrida, siempre hay gente que viene con el coche cargado de garrafas para aprovisionarse. Más adelante se deja el camino para continuar por un sendero que remonta la obaga del Sot del Noguer hasta las fuentes del Noi Gran y del Ferro, una al lado de la otra.

Camino por el Sot del Noguer.	Font de Les Paitides.
Font del Noi Gran.	Font del Ferro.
Un castaño que se resiste a morir.	Formas casi fantasmagóricas.

El sendero continúa remontando entre un bosque muy umbrío, con multitud de árboles dignos de admirar, que finalmente desemboca en el camino que lleva al Mas de La Vila. El camino baja por una carena soleada y permite disfrutar de una vista excepcional sobre la obaga de Matagalls.

Llegando al camino del Mas la Vila.	Mas El Martí.
Panorámica sobre la obaga de Matagalls.
La Creu de Matagalls.	Sant Segimon.

El Mas la Vila es una de esas masías inmensas del S.XVIII en las que habitaban tres, cuatro o más generaciones juntas. Conforme nos acercamos al Castanyer de les Nou Branques vamos viendo multitud de castaños, todos muy grandes y con unas formas extraordinarias.

Llegando al Mas La Vila.	Font de La Vila.
Un enorme castaño hueco.	Otro que está partido por la mitad.

Como tantos otros árboles monumentales, el Castanyer de les Nou Branques también ha servido de inspiración a los escritores, en este caso a Jaume Bofill i Mates (alias Guerau de Liost):

"Ets mil·lenari. Tens la soca plena i llisa.
Quatre homes no la poden, minúsculs, abraçar.
I ets canelobre de nou tanys que es subtilitza
en nou brandons mirífics d'improvisat altar."

Actualmente solo quedan siete de las nueve ramas originales y de estas, dos están secas. A pesar de todo las cinco ramas restantes parece que están en buen estado de salud.

El Castanyer de les Nou Branques.	Este también ha sufrido mucho... pero sobrevive.
Texturas de la madera muerta.	Parece la piel de un dinosaurio.

De vuelta a Viladrau nos desviamos del sendero señalizado para visitar tres fuentes más, la Font dels Enamorats, la Font de l'Oreneta y la Font de l'Erola.

Camino de vuelta a Viladrau.	El Pirineo señoreando sobre Viladrau.
Camino a la Font dels Enamorats.	Font dels Enamorats.
Font de l'Oreneta.	Breve poema de Josep Carner.

Terminamos la excursión comiendo en el Hostal Bofill; un hostal de los de toda la vida, con un menú de comida casera sin más pretensiones, en un comedor de estilo modernista y unas vistas excepcionales sobre Matagalls. De camino al coche pasamos por delante de la iglesia de Sant Martí y no podemos resistirnos de entrar... ¡sorpresa!, la iglesia en sí no es gran cosa - para nuestro gusto - pero aún conserva dos arcadas de lo que debió ser un atrio o galería de la iglesia románica original (S.XII).

Font de l'Erola.	Hostal Bofill.
Comedor de estilo modernista.	Fachada barroca de la iglesia de Sant Martí de Viladrau.
Interior de la iglesia (S.XVII-XVIII).	Arcadas de una galería del S.XII.

Para completar el día nos acercamos a visitar el Espai Montseny. Además de punto de información turística, se pueden ver dos audiovisuales que explican las leyendas sobre las paitides o dones d'aigua, la vida de Joan Serrallonga - el más famoso de los bandoleros del S.XVII - y para terminar el dedicado a las brujas. La historia de las brujas de Viladrau se remonta a las persecuciones que tuvieron lugar durante el S.XVII, este fue el municipio de Catalunya en que se ajusticiaron más mujeres acusadas de brujería entre los años 1618 a 1622... ¡un total de catorce mujeres para una población de unas 75 a 80 familias!.

El Espai Montseny.	Con vistas sobre Les Agudes.
Audiovisual sobre las Paitides y Serrallonga.	Audiovisual sobre las brujas de Viladrau.
Espacio dedicado al Montseny.	Exposición sobre las carreras de motos y el trial.

Los audiovisuales sobre las brujas, las paitides y Serrallonga están muy bien logrados, así como la exposición sobre las competiciones de trial que hay en la planta baja. Sin embargo la sala dedicada al Montseny nos ha decepcionado mucho, apenas unos cuantos plafones explicativos y poco más.

Distancia: 7,9 Km.
Desnivel acum.: +257 mts. -257 mts.