Basílica de la Sagrada Familia

Tras la visita a la Cripta de la Colonia Güell, no nos queda otra que visitar la Sagrada Familia... la verdad es que ya era hora después de toda una vida viviendo en Barcelona. El Templo Expiatorio de la Sagrada Familia fue un proyecto ideado por la Associació de devots de Sant Josep, entidad fundada por Josep María Bocabella en el 1866. El primer proyecto fue encargado a Francisco de Paula del Villar, quien diseño un proyecto en estilo neogótico con una iglesia de tres naves con crucero. El 1883 Gaudí pasa a encargarse del proyecto, cambiándolo por completo y dedicándose a él en exclusiva desde 1914 hasta su muerte en 1926. Gaudí solo llegó a ver completada la fachada del Nacimiento y una de sus cuatro torres. Una vez terminada tendrá 18 torres: las de los doce apóstoles en las tres fachadas, los cuatro evangelistas en el crucero, la de Jesús (la más alta con 170 metros) sobre el crucero y la de la Virgen María sobre el presbiterio.

La visita guiada no es barata (40€) pero es la mejor manera de conocer este monumento, ya que todo en él está repleto de simbología: la arquitectura, los juegos de colores de las vidrieras, los grupos escultóricos, la decoración, las medidas... absolutamente todo. Mucha de la información de esta simbología se puede encontrar en libros y guías o en la Wikipedia y es muy recomendable leerla antes de la visita.

Fachada del Nacimiento vista desde la Plaça Gaudí.	Torre de la Virgen María.
Claustro en estilo neogótico.	Puerta de la Fe.
Puerta central de la Caridad.	Puerta de la Esperanza.

Los grupos escultóricos de la fachada del Nacimiento desarrollan todo el ciclo de la Natividad y son obra de diferentes autores (Joaquim Ros, Jaume Vusquets, Etsuro Sotoo, Domènech Sugrañes, Llorenç Matamala...). Todos son de un estilo totalmente realista, hasta el punto que muchas de las caras fueron hechas a partir de moldes de trabajadores de la construcción del templo.

Las columnas centrales de la fachada están soportadas por dos tortugas (una de mar en la banda del litoral y una de tierra en la banda de montaña) que hacen alusión a la representación medieval de Jerusalén como una torre sobre una tortuga. Por la entrada de la derecha, la puerta de la Esperanza, se tiene acceso al claustro externo y la capilla del Roser, pero está cerrada fuera del horario de culto.

Tortuga marina.	Tortuga terrestre.
El Nacimiento.	Coronación de la Virgen María.
Visitación de María a su prima Isabel.	La Sagrada Familia con Jesús carpintero.
Presentación de Jesús en el templo.	Jesús entre los doctores del templo.
Adoración de los Reyes de Oriente.	Adoración de los pastores.
La matanza de los inocentes.	La huida a Egipto.
Interior del claustro de la Capella del Roser.	Alegoría del atentado del Liceu en la Capella del Roser.

Una vez concluidas las explicaciones sobre la fachada del Nacimiento la visita continúa por el interior del templo. La primera impresión que se recibe al entrar es realmente espectacular, sobre todo si es un día soleado como en nuestro caso. Se aprecia perfectamente la evolución de la arquitectura de Gaudí, desde el neogótico de las partes inferiores más antiguas al estilo naturalista de las columnas y bóvedas. Las columnas estriadas están inclinadas hacia el interior acentuando la sensación de altura de la nave y están construidas con pórfido, basalto y granito. Los cuatro capiteles de las columnas que soportan el crucero están dedicados a los cuatro evangelistas, los de las naves del crucero a los obispados de Catalunya (Barcelona, Tarragona, Lleida, Girona, Vic, Urgel, Solsona, Tortosa y Perpinyá) y los del resto de la nave a los de España. La cripta no es visitable fuera de las horas de culto ya que ejerce como parroquia del barrio, tan solo la podemos ver desde los arcos del deambulatorio.

Espectacular primera visión del interior.	Altar principal.
Bóveda del transepto norte.	Fachada interior del transepto sur.
Capitel de San Lucas.	Capitel de San Juan.
Capitel de San Marcos.	Capitel de San Mateo.
Naves laterales del lado norte con la tribuna/coro.	La tribuna/coro del lado sur.
Vitrales del lado norte en tonos azules y verdes.	Vitrales del lado sur en tonos rojos y amarillos.
La nave central.	Bóveda de la nave central.
Escalera de acceso al coro del altar mayor.	El deambulatorio y el órgano.
Baldaquino del altar central.	Pila de agua bendita como las de la cripta de la Colonia Güell.
Cripta en estilo neogótico.	Confesionario diseñado por Gaudí.

La siguiente parada de la visita es la fachada de La Pasión. Así como la fachada del Nacimiento transmite una cierta alegría, esta la concibió Gaudí como una fachada tétrica, las columnas parecen huesos y la total ausencia de decoración vegetal o floral la hace parecer árida y descarnada. Las esculturas que desarrollan todos los pasajes de La Pasión son obra del escultor Josep Maria Subirachs... no deja de ser curioso ya que fue uno de los firmantes de una carta-manifiesto publicada en 1965, en la que se cuestionaba la continuación de las obras.

Fachada de La Pasión.	Sacristía en la fachada de La Pasión.
Exterior de la nave principal.	Torres de la fachada de La Pasión.
La Flagelación en el portal central.	Detalle de una de las puertas centrales.
Grupo escultórico de la Crucifixión.	Detalle del Santo Rostro.
Retrato de Gaudí en el grupo de la Crucifixión.	Autoretrato de Subirachs en el grupo del Entierro.
El Beso de Judas y el cuadrado mágico.	Detalle de una de las puertas con un poema de Dante.
Jesús ante Pilatos.	El Entierro de Jesús.
La Santa Cena.	La Negación de San Pedro.

La subida a las torres de La Pasión nos depara unas vistas excepcionales sobre la ciudad y permite apreciar detalles de los pináculos y de la decoración exterior que, de otra manera, no es posible apreciar. La subida se hace mediante un ascensor en el interior hueco de la torre de Sant Felip, luego un pequeño puente para pasar a la de Sant Tomàs y luego acceder al balcón que se extiende hasta las torres de Sant Jaume el menor y Sant Bartomeu, donde está la escultura de la Ascensión de Jesús. La bajada se hace a pie volviendo a la torre de Sant Felip, el último tramo es una escalera de caracol espectacular.

Panorámica sobre Barcelona desde el puente entre las torres de la fachada de La Pasión.
La Ascensión de Jesús.	Rosetón del transepto.
Decoración exterior de la nave principal.	La Crucifixión.
Frutos eucarísticos: la uva.	Frutos eucarísticos: el trigo.
Pináculo de la torre de San Marcos.	Pináculos de la nave central.
Interior de una de las torres de La Pasión.	Escalera final de bajada.

Ya por libre continuamos visitando la reconstrucción de la escuela que se hizo para los hijos de los trabajadores y el museo. Una de las piezas que más nos llaman la atención es una campana tubular, prototipo que realizó Gaudí para las 60 campanas que deberían instalarse en el interior de las torres.

Exterior de la escuela de los trabajadores.	Aula de la escuela.
Fotografía de la maqueta original para el portal de La Gloria.	Diseño en planta original de Gaudí.
Prototipo de campana tubular de Gaudí.	Maqueta original restaurada para el portal del Nacimiento.
Maqueta polifunicular de la Cripta Güell.	El taller de maquetas.
Maqueta en yeso de la nave central.	Maquetas originales restauradas de los capiteles.

De vuelta a la nave principal aún nos quedamos un buen rato haciendo fotografías y admirando los múltiples detalles de esta. No sé si llegaremos a ver la finalización de las obras, pero ya en el estadio actual es una obra impresionante y uno de los diez monumentos más visitados del mundo.