domingo, 2 de diciembre de 2018

Santa María de La Tossa y Castell de Montbui

El Castell de la Tossa forma parte de la línea defensiva de los Castells de Frontera, establecidos durante los siglos X al XI. Del castillo solo se conserva parte de la torre principal, lo que más llama la atención son las esquinas redondeadas de la misma, de esta manera se reforzaban los puntos débiles que son las esquinas. Otro detalle que llama la atención es el uso del opus spicatum en las hiladas superiores, esta técnica de construcción - heredada del imperio romano - se fue abandonando a lo largo del siglo X. En la planta baja de la torre se puede visitar un pequeño museo con algunas piezas arqueológicas y, sobre todo, de las faenas del campo.
El conjunto de La Tossa.
La torre es lo único que queda en pie.
Opus Spicatum en la parte superior de la torre.
La parte trasera de la torre.
El pequeño museo de herramientas de labor.
Cruz carolíngia que coronaba el techo de la iglesia. 
Un molino manual.
La iglesia encuadrada desde la torre,
La iglesia de Santa María de la Tossa es originaria del S.X y fue construida al mismo tiempo que el castillo. Es de planta basilical con tres pequeñas naves algo irregulares, separadas por unas columnas macizas de poca altura y sin decoración en los capiteles. En las naves laterales se puede ver como se insinua una bóveda en arco de herradura. los tres ábsides de estilo lombardo se añadieron en el S.XI a iniciativa del obispo Oliba (971 - 1046), que también fundó el Monestir de Monserrat. Es una iglesia muy bonita por su rusticidad, y por lo bien cuidada que se encuentra.
La espadaña del S.XVII.
Los tres ábsides añadidos el S.XI.
La fachada sur con el arco de entrada.
Arco de entrada de medio punto.
Detalle de la imposta izquierda del arco de entrada.
La nave principal.
La nave del lado sur insinua una boveda de herradura.
Pila de agua bendita en la entrada.
Pila bautismal.
Una sepultura con una cruz carolíngia.
Tras visitar la torre y la iglesia damos una vuelta por todo el altozano que, en su momento, ocupaba el castillo. Al igual que la torre y la iglesia, todo el entorno está muy bien cuidado, con barandillas para evitar accidentes y muy limpio. Hay un silo medieval cubierto y en el extremo se encuentra el mirador del Salt de la Donzella. Según la leyenda una doncella cristiana era pretendida - se supone que con no muy buenas intenciones - por un personaje musulmán de la zona. La susodicha antes que caer en manos del "infiel" prefirió lanzarse al vacío desde ese punto... La hostia que se pegó debió de ser de campeonato, por lo que seguro que la doncella logró su proposito. En cualquier caso las vistas desde ese punto son excepcionales.
El silo medieval cubierto.
Visión directa sobre el Castell de Claramunt.
Vista desde el Salt de la Donzella hacia Montserrat...
Y hacia Igualada.
Para completar la mañana, nos encaminamos a ver una encina milenaria que se esconde en la umbría del Serrat de les Onze. Es un paseo muy relajado, más aun en un dia de sol como hoy, vamos siguiendo la carena de la Serra de Miralles por un camino amplio y de poco desnivel. Nosotros seguimos un ramal que va por la solana del Bosc del Benito, para luego para volver por la umbría donde se encuentra la encina. La encina se encuentra algo apartada del camino y realmente no sé si será milenaria, pero desde luego es bastante grande, además de gozar de muy buena salud.
En la carena del Mirador de la Tossa.
El Bosc del Benito.
En la umbría camino a la encina milenaria.
La encina milenaria.
De vuelta al Coll de la Creu del Castell de Montbui.
Parapente revoloteando alrededor del castillo.
De vuelta al Coll del la Creu del Castell unos parapentes nos distraen con su revoloteo alrededor del castillo. Por el camino de vuelta hemos encontrado algunos rovellons entre los pinos... ¡ya tenemos para el aperitivo de hoy!
Distancia: 4,1 Km.
Desnivel acum.: +113 mts. -113 mts.

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